Video-Blog de Lkstro

Otro modelo de sociedad es posible … invertiendo en igualdad para la sostenibilidad y democratización de la vida. Es tiempo de pasar a la acción sumando energías.

Derechos HumanosTirando del hilo

De mapas, territorios e identidades

Decir que nos movemos en el mundo de las representaciones es una obviedad; cada quien elabora su propio mapa personal de la realidad y a través de los filtros de su subjetividad identitaria obtiene el discurso.

La realidad es compleja, cada vez más, y el mapa nunca es el territorio, por mucho que se empeñen algunos medios de comunicación y estadistas cuando reproducen de forma sesgada informaciones y relatos bajo el halo de la supuesta objetividad. Podría ser una anécdota sin más, si no fuera por las veces que nos cuelan la simplificación de la realidad con la asignación lineal de etiquetas identificativas territorio = identidad. La mayor perversión que provoca la repetición machacona de este tipo de simplificación es el refuerzo involuntario del fanatismo, y con ello el alejamiento a una posible resolución del conflicto.

Con el tiempo una aprende que la objetividad no consiste en des­cribir lo que vemos sino en precisar el lugar conceptual e ideológico desde el que se realiza la observación de la realidad; y una aprende que identificar la construcción social de las identidades permite entender el contexto en el que se desarrollan más que arraigar su vgencia.

Este tipo de análisis suele estar presente cuando se realiza una crítica feminista de la representación, sobre todo cuando existe una intención consciente de evitar la dualidad y la polarización del discurso; sin embargo se diluye cuando se trata de observar otros conflictos sociales, politicos y humanitarios; acaso la representación de la muerte, la exacerbación del discurso del odio y el germen de la venganza agudiza el enfrentamiento visceral que mantiene la lógica del miedo.

El fracaso de la comunidad internacional en el conflicto Israel-Palestina puede ser interpretado desde este enfoque; cualquier negociación que no persiga como objetivo alcanzar un acuerdo común está abocada al fracaso de antemano, sin necesidad de la destrucción que genera.

El burdo intento de resolver el conflicto hasta ahora se ha basado más en exhibir cómo cada gobierno se aferra al biopoder que ejerce antes que a garantizar el derecho internacional humanitario y la simple premisa de que ningún bombardeo sobre la población civil puede estar justificado. Este burdo intento genera la reactivación del enterno dilema entre el bien y el mal; lo que quiere decir que la gente se posiciona a favor o en contra de uno u otro bando, y lanza consignas de apoyo o ataque, según sea el discurso de su mapa personal, dirigidas al pueblo palestino o al israelí. La posibilidad del entendimiento mutuo se aleja cada vez más, a medida que el mapa trazado militar y mediáticamente provoca el movimiento adverso entre aniquilación y refuerzo de las identidades colectivas, a las que se aferrarán la nueva hornada violenta que están alimentando los Estados de Palestina e Israel.

Gaza_El Roto

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*